En esta noticia podemos observar como más de la mitad de las empleadas de hogar no están dadas de altas en la seguridad social, este hecho provoca la explotación de esta mujer ya que no tiene contrato por lo tanto, se rige al horario que le pongan en esa familia, teniendo siempre el mismo salario fijado. Pero el dato más importante es, que poco a poco con la incorporación de la mujer al trabajo, los datos de cotización de las empleadas del hogar va aumentando incluso en tiempo de crisis. Esto se debe a la lucha de la mujer por salir de casa para poder cobrar un salario, y esto conlleva que esa mujer esté dada de alta en la Seguridad Social, puesto que, ser empleada de hogar es un trabajo tan digno como cualquiera. Hace unos años esto era impensable, ya que a la mujer sólo se le veía capacitada para las tareas del hogar, y con el paso del tiempo en la mayoría de las familias españolas, trabajan tanto el hombre como la mujer y por falta de tiempo, da lugar a que contraten una empleada del hogar. Esto también está condicionado porque el hombre no suele ayudar en las tareas de la casa, aunque ahora sí, ya que la mujer también trabaja y le ayuda para facilitar las cosas, puesto que ellos a lo mejor no se pueden permitir una empleada del hogar.
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